(La información es de La Tercera)
En la próspera Patagonia de la década de 1930, la industria de las pieles llegó al sur de Chile como un lucrativo negocio. Fue así que cientos de visones americanos (Neovison vison) fueron introducidos al país para fabricar abrigos a partir de su pretendido y lustroso pelaje. Sin embargo, este negocio no prosperó y los animales fueron echados a su suerte, adentrándose en la vida silvestre y provocando estragos para la fauna sureña.
Nada, bucea, trepa árboles y se escabulle por el terreno. Esta especie, pariente del hurón, mide entre 50 y 60 centímetros y no pesa más de un kilo. Sin embargo, su apetito es voraz. Caza aves nativas y de corral. Cuando entra a un gallinero, es capaz de matar al grupo de gallinas por completo. También se alimenta de peces, anfibios, crustáceos, insectos y mamíferos incluso más grandes que él.
No solo amenaza especies endémicas al depredarlas, sino que también el visón es conocido por transmitir enfermedades como la gripe aviar y el Covid-19. Incluso, científicos se inclinan a decir que podría ser un vector de transmisión para una nueva pandemia.
Agresiva plaga sigue expandiéndose por el país: peligrosa especie ya se encuentra en Chiloé
Un reciente artículo publicado por la Sociedad Americana de Ciencias, realizado por Thomas Peacock y Wendy Barclay, del Departamento de Enfermedades infecciosas del Imperial College London, resaltó el peligro que conlleva, tanto la crianza de este animal para la industria peletera, como también la amenaza que provoca el visón a la fauna y a la población humana.
“Al igual que con cualquier cultivo intensivo, el cultivo de pieles se lleva a cabo en un entorno animal de alta densidad que permite la rápida propagación de virus con potencial pandémico y la adaptación del virus a los animales que es poco probable que ocurra en la naturaleza”, expresaron los científicos en dicho artículo.
Desde la liberación de los individuos de visón como resultado de la crisis de la industria peletera, el animal se ha continuado expandiendo por el país. Su rango de distribución actual va desde la Región de Magallanes hasta la Región de La Araucanía. Aunque también existen territorios aislados en los que no se ha detectado presencia de visón americano debido a barreras biogeográficas.
Plaga sigue expandiéndose por el país: manejo de la eutanasia
Ahora, un nuevo análisis realizado por Ahuenco, una iniciativa de conservación privada en Chiloé, reveló la presencia de visones americanos en la isla, los que representan una muy importante amenaza.
Paula Troncoso, presidenta de Ahuenco, señala que lo preocupante es que se están viendo en áreas protegidas, compitiendo con la fauna local de manera muy agresiva. “Han habido avistamientos en el Parque Ahuenco, que colinda con el Parque Nacional Chiloé. También en el Río Chepu”.
¿Cómo se puede detener? Hasta el momento, el manejo es la eutanasia, pero debe ser supervisado por el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) , organismo que tiene pocos recursos para fiscalizar, añade Troncoso.